Capitulo Ciento Veintinueve.

'Volver a Respirar'
Capitulo 129.

Peter abrazó a Tomas como si no se hubiesen visto en años, sus sonrisas no se desaparecían de sus rostros al igual que la mía, se veían tan lindos abrazados. Al terminar el abrazó, se chocaron las manos como antes lo solían hacer, Tomas volteó y ambas lo miramos.
-Mamá, mira quien está acá! -exclamó tomando de la mano a Peter-
Asentí sonriendo y miré a Peter, el cual me miraba atentamente. Camine hasta ellos junto a Candela.
-Hola.
Dije al llegar a su lado, él solo se limitó a besar mi mejillar y darme un corto abrazó.
-¿Como estás? -me preguntó sin que su sonrisa se borrara de su rostro-
-Bien, bien -exclamé un poco nerviosa- ¿vos?
-Bien, un poco aproblemado por la facultad pero sobreviviendo a mi último año -rió-
-Ya queda poco, ánimo -sonreí-
Ambos miramos a Candela quien nos miraba atenta al igual que Tomas.
-¿Estas lista? -le preguntó Peter a Cande-
-Si si -sonrió-
-¿Como te fue? -preguntó interesado-
-Perfecto, tu sobrino esta en perfectas condiciones -le guiño el ojo y todos reímos-
-Creo que te olvidaste de contarme que tu hermana estaba embarazada -le reproche a Peter-
-No me olvide -me miró- solo es que no estábamos bien en ese momento y luego... -se aclaró la garganta- terminamos entonces..
-Entiendo -lo interrumpí un poco nerviosa-
-Boe, ¿vamos yendo? tengo clases más tarde -apuró Cande a Peter-
-Sisi vamos.. ¿vos también te vas? -me preguntó Peter-
-Si pero..
-Vamos, los llevo -me interrumpió-
-Si si, me quiero ir con Peter y jugar con él! -exclamó alegremente Tomas-
-Eso de jugar va a tener que ser otro día ¿si? -le dijo Peter mientras acariciaba su cabello-
-Bueno pero me la debes eh! -habló Tomas-
-Claro que si enano -sacudió aun más su cabello-

Los cuatro caminamos hasta el estacionamiento de la clinica, Tomas iba charlando con Peter de como le estaba yendo en el colegio, de sus amigos, de sus novias, etc. Y nosotras lo escuchábamos atentamente.
-Se llevan re bien -me dijo Candela algo sorprendida-
-Sí, Tomas adora a Peter -sonreí-
-¿Desde hace cuanto se conocen? -me preguntó curiosa-
-Desde que volvimos a argentina, Tomas acepto a Peter como su amigo y luego como el novio de mamá -respondí-
-¿Y cuando ustedes terminaron, preguntaba mucho por Peter? -volvió a cuestionar-
-Si, todos los días! -reí- pero buee, le explique la situación y él entendió, costo pero entendió -aclaré-
-¿Y el papá de Tomas esta presente? -preguntó complicada-
-Sí pero -revolví mis ojos y reí irónicamente- es un pelotudo.
-Uff! decimelo a mí -exclamó la flaca-
-Todos unos pendejos -acoté-
-¿Sufriste mucho con él? -preguntó interesada-
-Mucho -suspiré-
-Me interesa saber ¿sabes? yo tengo que pasar por algo parecido creo y..
-Si quieres acordamos algún día y hablamos -le propuse-
-Ay si! -exclamó- siento que vos me vas a ayudar muchísimo.
-Si, quizás si.. -sonreímos-
-Anota mi numero, así hablamos por whatsapp.
Me dio su numero y nos agregamos. Al rato después ya estábamos arriba del auto de Peter camino a casa.
El camino fue silencioso, solo escuchábamos a Tomas que no paraba de hablar y nosotros de reír por las boludeces que decía.
Nos despedimos de Peter y Cande, sin antes agradecerles por habernos traído a casa. Bajamos del auto y caminamos hasta el edificio. Antes de entrar me volteé y el auto aun seguía ahí, vi la sonrisa de Peter dirigiéndose a mi, le sonreí y retome mi camino.

Cuenta Peter.

-Aun la quieres ¿no? -me preguntó mi hermana luego de que Lali entrara al edificio-
-¿Se nota mucho? -la miré sin sacar mi sonrisa-
-Un poquito -rió-
-Siempre la voy a querer -respondí-
-Lindo -apretó mis cachetes- sos un tierno.
-Lo sé -reímos-
Prendí el motor y arranque, el camino a casa fue silencioso, Candela solo me miraba de reojo.
-¿Porque no vuelven? -preguntó de repente-
Le di una veloz mirada y me limité a sonreír algo nervioso.
-¿Porque no se dan la última oportunidad? -volvió a cuestionar- se re quieren! -exclamó-
-No es tan fácil -admití-
-Si es amor verdadero van a poder hacerlo fácil -aclaró-
Tosí un poco y luego suspiré.
-No se Candela, creo que simplemente no es el momento, ella se ve bien, yo estoy bien -la miré- no creo que sea necesario volver.
-Pero se quieren! -volvió a decir-
-Pero eso no es suficiente.
-Sos duro eh -dijo riendo-
-A veces -reímos-
Estacione afuera de casa y apague el motor, nos bajamos y entramos a casa en silenció. Mamá no tardó en aparecer y llenar de preguntas a Candela, al rato sonó el timbre, fui a abrir y era Sara, la amiga de Cande.
Fuimos hasta el living, Cande se fue a cambiar de ropa y yo me quede con Sara.

-¿No acompañaste a Cande al control? -le pregunté mientras me sentaba a su lado-
-No, tuve que hacer unos tramites... -me miró-
-¿Algo es más importante que acompañar a mi hermana? -bromeé-
-Claro que no! -rió y yo la seguí- na, enserio.. me estoy por cambiar de casa y es un embole todo! -aclaro-
-Ahh! ¿y te cambias sola? -le pregunté curioso-
-Si, a un depto cerca de la facu -respondió-
-¿Y porque?
-Que chusma Peter! -exclamo riendo-
-A boee! perdóneme señorita exclusividad! -la jodí y reímos-
-Nada, mis padres se van a Londres por un tiempo y como soy hija única, me compraron un depto -sonrió- así que ahora estaré solita acá en buenos aires!
-Noo, sola nunca Sarita -la abrasé- vos sos parte de la familia.
-Si lo sé Pitt! -sonreímos-
-Pero tenes que inaugurar con todo el depto eh! -le advertí-
-Obvio, vos vas a ser el primer invitado -aseguró-
-Te la voy a cobrar -reímos-
Charlamos un rato más hasta que Cande bajó, se despidieron y se fueron a la facultad. Mientras yo tenia que volver a la clínica en donde estaba haciendo mi practica.

Cuenta Lali.

El fin de semana había llegado al fin. Y con Candela habíamos acordado vernos hoy, ella nos invitó a su casa, así Peter también pasaba un tiempo con Tomas.
Antes de tocar el timbre de la casa de Peter, sentí una sensación muy rara, era extraño venir aquí luego de tanto tiempo, y más aun venir con Tomas.
Toque el timbre y rápidamente alguien abrió, y quien más que él. Peter.


Continuara....