'Volver a Respirar'
Capítulo 161.
Cuenta Peter.
Desperté con el insoportable sonido de la alarma de mi
celular {la había puesto antes de quedarme dormido}, bostecé y me frote los
ojos, sonreí al recordar quien estaba a mi lado, entonces miré a mi derecha y
me encontré con aquel hermoso cuerpo a mi lado. Dormía plácidamente con la
cabeza enterrada en la almohada y el cabello esparcido sobre ésta. Se veía
adorablemente sexy, era tan linda de todas las maneras posibles, y lo mejor es
que era solo mía.
Me acerqué y besé su hombro desnudo.
-Amor.. -susurré-
-Mmm.. -se quejó-
Se enterró aún más entre las sabanas pero esta vez su
mano agarro la mía. Sonreí y acaricié sus nudillos con mucha delicadeza, la
observé por algunos minutos, era tan linda.
-Abre los ojos -murmuré-
Negó y sonrió a la vez. Di una risita.
-Me tengo que ir -musité-
-Mmm.. no.
Se volvió a quejar y se acercó a mí, apegó su cuerpo al mío
y me abrazó. La imité, y la envolví entre mis brazos, acariciando su espalda y
sintiendo su aroma tan único.
-Se nos va a hacer tarde -aseguré-
-Unos minutitos más -dijo apoyando su boca en mi torso
desnudo-
-Tomas se va a despertar -reí-
Suspiró y levantó su mirada, abrió los ojos y sonrió al
ver que yo la miraba atentamente.
-Buenos días -hablé-
Sonrió y se acercó a mi boca, dejó varios piquitos.
-Muy buenos días -corrigió-
-Linda -le di un piquito-
Se acurruco en mi pecho mientras se quejaba.
-Quiero quedarme así, todo el día con vos -habló con un
tono de voz aspero-
-Pronto -besé su frente-
Diez minutos después, ya estábamos despidiéndonos en la
puerta del departamento. Había sido una buena noche con ella, riéndonos,
hablando, dándonos amor.. Nos complementábamos a la perfección, de eso no tenía
dudas.
Llegue a mi departamento, y me duche, en una hora más
tenía que estar en la clínica.
Cuenta Lali.
-¿Entonces, eso es un sí? -preguntó Pablo luego de una
extensa charla sobre el viaje-
-Si -dije rendida, pero con angustia-
-¿Enserio? -dijo emocionado, sus ojos reflejaban la
felicidad ante mi respuesta-
-Sí, Pablo, si! y no me hagas repetirlo una vez más
porque te juro que cambio de decisión eh -le advertí-
-Gracias!
Se levantó de su silla y vino hasta mí para abrazarme.
-No sabes lo importante que esto es para mí -susurró-
-Me imagino -suspiré-
-No te preocupes de nada -se separó de mí- te juro por mi
vida que lo voy a cuidar.
-Lo van a cuidar -corregí- tu novia igual eh -le advertí-
-Si -rio- tenes que conocerla antes que nos vamos -volvió
a su silla-
-No lo creo -tome un poco de agua-
-Deberías, enserio -insistió- así estás más segura.
-Supongo que vos no dejarías en manos de una asesina a tu
hijo -ironicé-
Volvió a reír y me miró.
-Enserio La.. solo una reunión antes de irnos, y listo..
te va a caer muy bien -sonrió-
-¿Estás enamorado? -le pregunté mientras cortaba un poco
de carné de mi plato-
-Muchísimo -contestó- ella es.. no sé, especial, creo que
nunca me podría aburrir de ella.
Sonreí, me gustaba verlo así de bien.
-Hace tiempo que no te veía tan feliz -aseguré- supongo
que algo de bueno tiene que tener esa chica -reí-
-Te va a encantar, son muy parecidas en la personalidad
-musitó-
-Boee.. tampoco es que yo me ame -reímos-
-Gracias, enserio La.. -dijo sin quitarse la sonrisa del
rostro-
-No es nada -suspiré- te lo mereces, sos un buen padre,
tenes derecho a disfrutar con tu hijo y yo voy a tener que empezar a aceptarlo.
-Tampoco es que te lo voy a quitar siempre, solo es que
este viaje lo quiero disfrutar con él-
-Entiendo -sonreí-
Seguimos charlando por unos quince minutos más, luego
ambos teníamos que ir a laburar.
Entré a la tienda y de inmediato me puse a trabajar,
había bastante movimiento.
Siete y media de la tarde y junto a Tomas habíamos
llegado al departamento. Cansados, agotados, pero a él no se le olvidaba que
Peter iba a venir a jugar con él hoy.
Mi citofono sonó, el conserje me informó que tenía
correo. Deje a Tomas solo un rato para bajar a buscar las cartas.
-Gracias Don Luis -le agradecí al conserje-
-Hey hey.. morochita -me llamó una voz ronca-
Volteé y me encontré con Peter entrando al edificio.
Sonreí y él camino hasta mí.
-¿No ibas a esperarme? -preguntó riendo-
-No -negué riendo-
-Ah, perfecto! -dijo sarcástico y yo reí-
-Veni -agarré su mano-
-Hey, la manito -advirtió riendo-
-Cállate -reí-
Caminamos hasta el ascensor ante la interesada mirada de
Don Luis. Entramos y cuando las puertas se cerraron, ambos, casi por inercia,
nos comimos la boca.
-¿Que hacías allá abajo? -me preguntó cuando entramos al
departamento-
-Correo -les señale las cartas-
-Ahh..
-Peter! -exclamó Tomas-
Se saludaron y yo me fui riendo hasta la cocina. Puse a
hervir agua para cocinar la cena y luego me senté para revisar las cartas. Eran
cinco, cuentas, y más cuentas.. menos la última. Era una citación del juzgado.
La abrí rápidamente y la leí, estaba citada a declarar por mi demanda a Diego.
Me mordí el labio inferior complicada, mierda! esto
recién había empezado.
-¿Pasa algo? -preguntó Peter al entrar a la cocina y
encontrarme con mi cara de preocupación leyendo la carta-
Lo miré con miedo, con ganas de no querer contarle pero a
la vez sí. No le respondí y la preocupación de Peter aumentó.
-¿Que es esa carta? -me preguntó acercándose a mí-
-Una citación por el caso de.. Diego -dije casi
susurrando-
Abrió sus ojos y rápidamente me quitó la carta de mis
manos y la empezó a leer.
-Al fin, ya era hora de que lo formalizaran -dijo
mientras la leía-
-¿Tengo que ir? -pregunté nerviosa-
-Si -me miró- obvio que si, vos sos la principal afectada
Lali.
Suspiré.
-¿Porque lo preguntas asi? -se sentó a mi lado-
-Me da un poco de miedo igual -lo miré asustada-
-No -tomo mi mano y la acarició- no tenes porque tener
miedo -me miró fijamente- yo voy a estar con vos, y ese hdp va a pagar por lo
que te hizo.
Asentí.
-Ei -acarició mi mejilla y se acercó un poco más- no va a
pasar nada malo ¿si? -asentí nerviosa- te amo -susurró-
Sonreí, él me daba tanta seguridad a mi vida.
-Esto iba a tener que pasar en algún momento, por algo lo
denunciaste ¿no? -asentí- juntos vamos a salir de esta.
-Te amo -musité perdida en sus ojos-
Sonrió y apoyo sus labios en los míos para luego besarme
con mucha delicadeza.
-
Sábado, al fin.
El día más esperado de la semana había llegado, hoy junto
a Peter y Tomas íbamos a ir a los juegos de diversión a petición de mi hijo.
Tenía que aprovechar lo máximo que pudiese a Tomas antes de que se fuera.
Nos subimos a un juego que era para los tres, y así
sucesivamente hasta que Tomas se quiso subir a otros que eran para chiquitos, y
así nos dejaba un tiempo a solas con Peter.
-Lo voy a extrañar muchísimo -dije mientras lo veía
arriba del juego-
-Pero me vas a tener a mi -acarició mi cintura- pensa
positivo, al menos vamos a pasarla bien -sonrió-
-Si -sonreí- pero de todas maneras una parte de mí
siempre va a estar preocupada por Tomas.
-Él la va a pasar mejor -aseguró y yo reí-
Mi celular comenzó a sonar, lo saque de mi cartera y miré
la pantalla. "Rochi llamando"
-Maldita hija de puta! ¿Porque no te dignas a aparecer o
contestar mis llamadas? -exclamó con cierto tono de molestia y exageración-
Reí. La verdad es que había omitido todas sus llamadas
desde ayer.
-Perdóname.
-No! ¿y encima te reís? ¿sabes lo preocupada que estuve?
-me cuestionó exagerada-
-Boe! rubia, para lo exagerada ¿sí? estoy bien
-¿Y porque carajo no me contestabas? -me preguntó
indignada-
-No sé, mi teléfono anda mal a veces -mentí-
-Claro, y yo soy rubia natural -ironizó-
-No, eso nunca -reí-
-No te hagas la chistosita eh -me advirtió- vos andas muy
rara y desaparecida.
-Nada que ver, estoy igual que siempre -aseguré-
-No no, vos me estás escondiendo algo, yo lo sé -aseguró-
-¿Algo como que decís vos?
-No sé! pero.. tengo algunas dudas.
-¿Cuáles?
-No será que volviste con.. Diego -dijo con un tono de
voz serió-
Reí a carcajadas.
-No, estás en el camino muy equivocado -dije riendo-
-¿Segura? mira que yo te mato si volves con él! -me
advirtió-
-No, quédate tranquila.
-Boeboee.. ¿dónde estás ahora?
-En el parque con Tomas, quería venir a los juegos y lo
traje -expliqué-
-¿Solos los dos? -preguntó curiosa-
-Si -mentí-
-Mmm.. algo no me calza -dijo aun de curiosa-
-¿Y para que me llamabas linda? -le cambié el tema-
-Nada, a la noche haremos algo con Nico en casa y..
¿venis?
-Voy a tratar, estoy con Tomas este finde y..
-Mi mamá lo puedo cuidar, vos lo sabes -se adelantó-
-No quiero molestarla.
-Entonces yo la molestó -rio-
-No boluda -reí-
-Si La, veni a divertirte, quiero verte! -exclamó-
-Boee.. habla con tu mamá ¿si?
-Si gorda, te aviso en un rato pero contéstame eh!
-Si mi amor! -reí-
-Nos vemos más tarde entonces.. te amooo morocha y a la
noche tenemos muchas cosas de que hablar, lo intuyooo! -me advirtió
riendo-
-Chau chau, nos vemos -reí y corté-
-¿Que tanto quería la rubia? -me preguntó Peter-
-Invitarme a su casa a la noche, harán algo..
-Ah.. boee, y yo nada eh! -reviso su celular- ah.. tengo
un mensaje de Nico -reímos y él lo abrió- y me invita a su casa -me miró y yo
reí-
-Boludo -le saque la lengua-
-Ey -se quejó-
-Te amo -sonreí-
-Yo también hermosa -besó mi mejilla- y esta noche, vamos
a pasarla mucho mejor que las otras -susurró en mi oído con cierto tono de
picardía-
Sonreí y mordí mi labio inferior entusiasmada ante la
idea. Ya quería que llegara la noche, específicamente, después de la fiesta.
Continuara...
Amor nivel laliter.. AAAAAAAAH, LAS QUIEROOOO!!!