Capitulo Noventa y Ocho.

"Volver a Respirar"
Capitulo 98.

La miré sorprendido, ¿como sabía ella que me había encontrado con Eugenia?.
-¿De que hablas Romina? -le dije casi gritando e intentando seguir caminando-
-No te hagas el boludo, los ví Peter! -estaba intentando salir al igual que yo-
No quisé responderle nada y simplemente segui pasando por en medio de gran multitud de gente, ella venía detrás mio sin soltarme el brazo.
Cuando al fin habíamos salido del boliche ella no tardó en volver al tema inicial.
-¿No me vas a responder? -me preguntó-
-Me la encontre acá nada más! -exclamé algo molesto-
-Claro ¿y por eso, el abrazo y el casi beso no? -me preguntó al parecer igual de molesta que yo-
-¿Y que te importa a vos? -la miré-
-Lali no se merece esto, vos tenes que tenerle un minimo de respeto mientras ella no este presente y..
-No te metas Romina -la interrumpí-
-Te estoy cuidando Peter!
-Yo me puedo cuidar solo -le aclaré y trate de seguir mi camino-
-Espero que le contes a Lali que la viste y que... -me hablaba mientras me seguía-
-¿Te podes callar? -volteé y me pare enfrente de ella- ¿que te pasa? ¿no tenes otra cosa mejor que andar pendiente de mi relacion con Lali? -y ya estaba furioso con ella-
-Solamente te cuido para que no hagas algo que luego te podas arrepentir! -me gritó-
-Mira flaca, si yo quiero hacer algo lo voy a hacer igual, con o sin vos cerca ¿entendes? no soy un pendejo para que me andes controlando -le aclaré- ¿o a caso Lali te mando a controlarme? -ella negó- ¿entonces que mierda te pasa Romina? -le pregunté sin entenderla- no entiendo porque este interes por mi relacion con Lali! -ella solo me miró por algunos segundos- o tal vez ese interes por mi... -agarré su hombros- ¿a caso gustas de mi? -le pregunté totalmente desconcertado-
-No digas pelotudeces Pedro! -dijo molesta- Sos mi amigo boludo!
-¿Entonces? ¿me podes explicar que mierda te pasa? -le pregunté casi queriendola matar-
-Nada... -suspiró- hace lo que queras, pero después no te arrepientas de las cosas que haces, y menos me vengas a llorar de que la perdiste por boludo ¿estamos?..

Sacó bruscamente mis manos de sus hombros y se fue casi corriendo de vuelta al boliche.
Suspiré, bufé y contuve mi bronca.. Lo que ma faltaba! Romina haciendome una escenita de celos o algo parecido, metiendose en donde no debe y tomando el rol de mi novia.. ¿que carajo se creía que era? era solo mi amiga, y a Lali a penas la venía conociendo.. Es rara, muy rara.. lo único a lo que la puedo asociar en estos momentos es en que ella guste de mí o algo así porque si no, no entiendo su enojó.

Llegué a la casa en menos de quince minutos, la bronca casi me comía por dentro, las ganas de mandar todo a la mierda tan solo con saber que Lali había pasado tiempo junto a Pablo y Tomas quizás como una familia, me daban ganas de terminar todo pero me tenía que contener, tenía que analizarlo todo, cada palabra de Eugenia, y primero que todo, tenía que hablar con Lali...
Miré la hora, faltaba 7 minutos para que fueran las tres de la mañana, decídi enfriarme dandome una ducha que no resulto mucho pero al menos pude tranquilizarme..
Me recoste en la cama boca arriba, pusé mi cabeza en el almuhadón y sentí el perfume de Lali, su olor había quedado intacto allí.
Agarre el celular y comencé a escribirle un mensaje, un corto mensaje.
"¿Estas despierta?"
Lo envié, y pusé mis manos en mi rostro.. necesitaba hablar con ella y que me aclarara todo de una vez. Lo más seguro es que estuviera profundamente dormida, así que deje el celular a un lado y me fui al balcón. Necesitaba tomar aire y pensar.
Pero algo me interrumpió,  y ese algo fue mi celular.. Corrí a la habitación y lo tome, era un mensaje de ella.
"Sí, no puedo dormir... ¿vos en que andas?"
Que fría y cortante, pensé...
Marque su numero, y pusé el celular en mi oreja.
-Hola -hablo ella por a través del celular
-Hola -respondí un tanto seco-
-¿Pasa algo? -me preguntó al notar mi voz-
-No sé -respondí con el mismo tono-
-¿Como no sabes? -me preguntó desentendida-
-¿Estás sola? -le pregunté desconfiado-
-Sí, ¿con quien voy a estar? aparte de Tomas que esta durmiendo -habló con un tono de voz bastante sorprendida-
-Y no sé, eso decimelo vos.
-¿Que yo te diga que? -y aún seguía sin entenderme al parecer-
-Pff... -bufé-
-Peter! ¿podes hablar claro por favor? -me dijo enojada-
-Solo si me contestas con la verdad -respondí-
-Siempre lo hago, no entiendo..
-¿Que onda con Pablo? -le dije de una, sin filtro, sin vueltas.. no quería seguir haciendome más la cabeza-

Continuara...

Capitulo Noventa y Siete.

"Volver a Respirar"
Capitulo 97.

Y ahí estaba Eugenía mirandome con su caracteristica sonrisa, sus verdes ojos achinados, su cabello más rubio de lo normal y bastante más delgada.
Sonreí casi por inercia, no me esperaba verla aquí. Ella cuidadosamente se me acercaba.
-Hola -dijo, mientras chocaba su mejilla derecha contra la mía-
-¿Que haces acá? -le pregunté sorprendido-
-Vacaciones! -contestó junto a una animosa sonrisa, yo solo sonreí algo incomodo- vos también ¿no? -me preguntó tratando de establecer una charla-
-Sí, ya sabes.. lo tipico -respondí y ella rió-
-Pensé que este año no ibas a venir -aseguró-
-¿Porque? -le pregunté desentendido-
-No sé, creí que ibas a pasar las vacaciones con tu novia -contestó sin cambiar el tono de voz-
-Vos mejor que nadie sabes que mis amigos son sagrados -aclaré y ella sonrió-
-Me alegra saber que al menos en eso no has cambiado -agregó-
-¿Cambiado? -le cuestioné- yo no he cambiado Eugenia! -exclamé-
-Para mi sí -dijo entre dientes haciendo que su sonrisa desapareciera-
-Sigo siendo el mismo que conociste hace casi cuatro años -la miré fijamente y ella bajó su vista-

Un incomodo y tensó silenció se hizo presente, ella tenía su vista pegada en sus pies que movía de un lado a otro, yo solo la observaba atentamente.
-¿Y que tal...tu vida? -ella levantó su vista y se encontró rapidamente con la mía- ¿como estás? -le pregunté complicado-
-Bien... -suspiró- al menos he disfrutado lo que va de las vacaciones -sonrió tensa-
-¿Y en lo demás? -volví a cuestionar y ella frunció un poco el ceño- digo, tu vida no sé... hace mucho que no hablamos tranquilamente -ella asintió-
-Todo bien, no me quejó... -junto sus manos algo nerviosa- luego de ese encuentro en tu casa entendí que no podía seguir aferrada al pasado, tenía que volver a empezar y seguir con mi vida -yo asentí mientras la miraba atento- y eso es lo que estoy haciendo, disfrutando de mi vida -sonrió-
-Me parece genial -sonreí al igual que ella- me alegra verte así aunque estas muy flaca -dije con un tono de preocupación-
-Estoy igual que siempre! -exclamó-
-No Euge, estas más rubia y muchisimo más flaca -aclaré y ella negó- sí -insisti-
-Ok, la tintura que me estoy echando en el cabello es dos tonos mas rubios que el de antes -dijo riendo y yo la miré serio- ¿que? es cierto! -exclamó-
-Ei -agarré delicadamente sus hombros- recorda la charla que tuvimos una vez sobre el peso -ella suspiró- Euge -ella me miró fijamente a los ojos- no quiero que tengas alguna enfermedad después, quiero que estes bien, sos hermosa tal cual sos, no tenes para que arreglar tu cuerpo ¿sí?
Ella asintió.
-¿Porque tanta preocupación? -me preguntó-
-Porque a pesar de todo te quiero, y quiero verte bien -volví a decir-
-Lo sé -sonrió- y yo también te quiero por eso mismo te digo que tenes que disfrutar tus días acá, estoy segura que tu novia o ex, debe estar pasandolo genial en buenos aires -aseguró-

Encarné una ceja y bajé mis manos de sus hombros, la miré por algunos minutos, no entendía porque decía eso.
-Explicame eso que dijiste porque no entiendo -le pedí-
-Eso Peter... -suspiró- mira yo no sé que habra pasado entre vos y ella pero yo la ví en el terminal, y no estaba sola...
-¿Como que la viste? -volvi a preguntar sorprendido-
-Sí, la vi ahi esperando a alguien o mejor dicho a un chico y un nené, que cuando los vió casi gritó de alegría, se veía feliz abrazandolos a ambos y luego se fue con ellos hacía el auto del chico, parecían muy felices los tres.
-¿Segura que era ella? -le pregunté tratando de controlar todo tipo de sentimientos y emociones-
-Segurisima, incluso ella me miró varias veces..
Bufé, puse mis manos en mi rostro y suspiré tirando mi cabeza hacía atrás.
-Encontré rara la situación, por eso te lo dije.. no sé si seguira siendo tu novia o tu ex pero..
-Cállate! -la interrumpí y ella inmediatamente se quedó callada mirandome- sorry, pero esto no es asunto tuyo.
-Lo sé.. -susurró-
-¿Viste algo más? -le pregunté tratando de contenerme aun-
-No, osea ví un par de besos.. PERO! no sé donde, no sé si en la boca o cerca muy cerca -aclaró-
Suspiré, la miré y ella solo mordió su labio inferior.
-¿Todo bien? -me preguntó algo complicada-
-Si, tranqui.. -miré a todos lados, no sabía que hacer exactamente- creo que mejor me voy.. -la miré- cuidate y..
-Vos cuidate -me interrumpió, y en cosa de segundos la tenía ella abrazada a mi cintura, bajé mis brazos y acaricié su espalda- disfruta.. -me susurró y besó mi mejilla, casi casi llegaba a la comisura de mis labios-
-Nos vemos...
Me separé, y comencé a caminar hasta la puerta para volver al boliche.
Definitivamente no sabía que hacer, no sabía si creerle o no, seguramente ese chico del que Eugenia hablaba era Pablo junto a Tomas pero.. ¿porque estaba tan feliz? ¿porque habían abrazos? ¿besos? ¿porque se fue con él? ¿porque él viajo a buscar hasta el terminal? ¿porque se veían felices?..
No, los celos no me iban a jugar una mala pasada, no esta vez!... Decídi volver al boliche, buscar mi chaqueta y regresar a la casa, allí podria analizar todo con más tranquilidad.

-¿Pasó algo con Eugenia? -me preguntó Romina al instante en que me vió algo desesperado por irme-


Continuara...