5 de febrero de 2013

Capitulo Ciento Veintisiete.

Lo siento, las adoro, son grosas, sé que les fallo siempre pero no tengo con que excusarme, simplemente no tengo tiempo. Sorry, ganas de escribir no me faltan pero no me queda tiempo. Voy a tratar de terminar luego la novela! Un beso giganteeeee y gracias por el aguante a pesar de mi irresponsabilidad. Son las mejores.
.

'Volver a Respirar'
Capitulo 127.

Cuenta Lali.

-Creo que es todo.. -le dije a Roció mientras dejaba una caja sobre mi cama-
-¿Estás segura? -me preguntó por quinta vez-
-Sí -aseguré- no quiero saber nada más de él.
-Te entiendo -se acercó y acarició mis hombros- es un hijo de puta.
-Lo odio -afirmé mirando fijamente a los ojos de mi amiga- si pudiera lo mataría ahora mismo -y mi bronca se hacía presente una vez más-
-No esta bueno odiar pero creo que él es una excepción -acotó mi amiga-
-Es una basura -dije mientras suspiraba- te juro que me arrepiento tanto de haberlo conocido, es un mal nacido -y nuevamente estaba furiosa al recordar la situación- no puedo creer como mierda me hizo eso, como nos hizo eso! -exclamé con odio-
-Y bueno, uno nunca termina de conocer a las personas.. -me abrasó-
-Claro, y yo fui la pelotuda que le creyó siempre, lo apoyo y mira como me paga!
-Tranquila gorda, vos no tenes la culpa de ser tan buena persona... -trató de tranquilizarme-
-Lo odio, te juro -repetí-
-Veni, vamos a tomar un poco de agua.
Tomo mi mano y caminamos hasta la cocina, nos preparamos un café y nos sentamos en la mesita.
-¿Y que pensas hacer ahora? -me preguntó preocupada-
-No sé -suspiré- creo que lo mejor sera cambiarnos de cuidad o algo parecido -la miré confundida- quiero estar lo más lejos posible de él.
-Yo te apoyo, lo sabes ¿no? -apretó mis manos-
-Lo sé rubia -sonreí- gracias por todo amiga -la abrasé- sos fundamental en todo -besé su mejilla-
-Vos también -sonreímos- y ahora vamos a pensar con la cabeza fría y hacer todo bien ¿si?
-Bueno -bufé-

Cuenta Peter.

-Si dejas de comértelo todo, no me enojo eh -le advertí riendo a Candela, luego de haber cerrado la heladera-
-Lo siento che! -rió- mis antojos me tienen echa una vaca! -exclamó chillona-
-Y eso que recién tenes cuatro meses -dije riendo-
-Imagínate a los ocho! uuuuuuh, no, yo voy a explotar -exageró mi hermana-
-Sos una boluda -dije riendo-
-Gracias hermanito, yo también te amo -ironizó y luego rió junto a mí-
-¿Mañana tenes control? -le pregunté mientras me preparaba un sándwich-
-Ajam.. Once de la mañana -respondió luego de tomar jugo- ¿me vas a acompañar? -me pregunto tiernamente-
-Quizás pase por vos cuando estés lista -respondí- tengo unas cosas que hacer en la facu.
-Ok, te espero entonces -sonrió- igual iré con Sara.
-Dale, me esperan -sonreímos-
-¿Que onda el laburo? -preguntó curiosa-
-Nada, un embole todo pero buee.. me queda poco, este año y fue la facu -me metí el sándwich a la boca-

-¿Y el corazón? -la miré- ¿como está?
Reí, tome un poco de jugo y volví a reír.
-Esta bien, bombea sangre aún.
-Ay Peter! -exclamó riendo- no me refería a eso boludo!
-Explícate bien entonces -reí-
-Vos explícame si estás soltero o no!
-Cien por ciento solterisimo, sin compromiso y solito por la vida -reímos- y no me quejó si me presentas a una de tus amigas eh -dije riendo-
-Aaah si, claaaaaa! -rió- como te conozco tanto, no te voy a presentar a ninguna -me sacó la lengua y ambos reímos-
-¿Y vos flaca, que onda con ese coqueto corazoncito? -la jodí-
-Acá estamos, con una panzota enorme y miles de conquistas -me guiño el ojo riendo-
-Matas a todos con esa panza, gorda lechona -la cargué y ambos nos cagamo de risa-
-No seas malo conmigo Pitt! -hizo puchero-
-Nunca mi vida -la abrasé- son bromas -besé su mejilla- te ves hermosa con esa pancita -acaricié su panza- y encima acá esta el motivo de mi felicidad.
-Vas a ser el mejor tío del mundo, estoy segura -aseguró con una tremenda sonrisa-
-¿Tío? -la miré y ella asintió- no señorita, voy a ser su papá.
Candela rió y me abrasó aun más.
-Gracias por todo, sos el mejor hermano del mundo -besó mi mejilla- te amo.
-Yo más chiquita, y a vos también eh! -le hablé a la pancita y ambos reímos-
-Ay dios!, yo no se porque vos estas solo si sos un tiernucho! -apretó mis mejillas-
-Y porque nadie me quiere, todos me odian, y tampoco hay gusanitos -dije como nene y ambos reímos-

Estuvimos unos minutos más charlando de cualquier tontera que se nos ocurría, hasta que ya se había echo un poco tarde. Subí a mi cuarto, me metí al baño, me lavé los dientes y la cara para luego sacarme toda la ropa y quedar solo en boxer.
Volví al cuarto, agarre mi notebook y me estiré en la cama mientras ponía la note sobre mis piernas. Abrí facebook, y comencé a hablar con Nico, revisé inicio y en eso, aparece un estado de Lali que me sorprendió ;


'En este momento mi felicidad sería tumbarme en tu pecho y ver la vida pasar, sencillo y tan difícil a la vez'.


¿Para quien iría dirigido?.
No pensé en nada más, eche mi cabeza hacía atrás y suspiré, la extrañaba. Inmediatamente recordé nuestra última charla, hace casi dos meses en su departamento, cuando todo se terminó definitivamente.

Flashback.

-Creo que lo mejor es terminar.
Lo dijo. Justamente esas eran las palabras que no quería escuchar pero lo había dicho. Había venido claro en recuperar la relación, en luchar, en solucionar todo pero ella ya no quería nada más. Había abandonado el barco, había terminado con este amor que para mi, era el más grande que había tenido.
-Es lo mejor, por lo menos para mí. -continuó-
¿Para ella lo mejor era apartarme de su vida para siempre? ¿Sacarme de su futuro?. Sentí una fuerte presión en mi pecho, y solo lloré. Lágrimas y lágrimas de amargo dolor.

Ella solo me miraba, algunas lágrimas se le escapaban pero rápidamente se las secaba.
 La miré con mis ojos rojos, y así nos quedamos por lo menos cinco minutos. Era un crucé de miradas que tenían todo tipo de sentimientos, fueron los minutos más eternos de mi vida.

Ella fue la que decidió cortar ese doloroso juego de miradas, se levantó un poco nerviosa y camino hasta su cuarto. 
Me quede ahí sentado esperando a que volviera, pero mis ojos no pararon de botar lágrimas.
-Te traje tus cosas.
Habló cuando regreso al living. Levanté mi mirada y la vi parada frente a mi con un bolso.
-Es la ropa que tenias acá -concluyo rápidamente, su voz comenzaba a quebrarse-
Asentí y pasé mis manos con mi rostro. Me levanté y nuevamente me quede mirándola fijamente.
-¿Eso es todo? -le pregunté con mi voz ronca- 
-Sí, creo que tenías solo esta ropa acá y..
-No me refiero a eso Mariana -dije algo dolido-
Ella me miro fijamente, sus ojos se nublaron y ella apartó su mirada de mi.
-¿No vamos a intentarlo una vez más aunque sea? -le pregunté con mucha pena-
-No creo que sea bueno intentar algo más -murmuró-
-¿No? -la miré sorprendido-
-No estoy bien Peter -me miró con sus ojos a punto de explotar en llanto-
-¿Te estoy haciendo muy mal? -asintió- perdóname -le pedí sincero-
-No es tu culpa -dijo de inmediato- los dos hemos echo las cosas mal, yo inicié todo esto, vos la seguiste y los dos terminamos con esto -dijo con un hilo de voz- y creo que pasó lo que no queríamos que pasará.
Mordí mi labio inferior y la volví a mirar.
-¿Vas a estar mejor sin mi? -le pregunté esperanzado-
-No sé, pero creo que es lo mejor para los dos -contestó nerviosa- el tiempo dirá lo demás.
Boté aire y apreté mis ojos, ella solo me miraba mientras sus lágrimas caían poco a poco.
-Te amo Peter, no lo olvides porfavor.
Susurró entre llanto, la miré sorprendido y ella solo se lanzó a mis brazos. Abrazó mi cintura y apoyo su cabeza en mi pecho.
-Sos lo mejor que me pasó en la vida, nadie me había amado tanto como vos -habló sin soltarme-
Atónito la enrede con mis brazos, la aferre a mi cuerpo y besé su frente.
-Te amo con toda mi vida Mariana.
Y juntos, así tal y cual estábamos, abrazados en medio del living, lloramos unos largos minutos los cuales fueron interrumpidos por las ganas de unir mis labios con los de ella.
Agarré su rostro con mis manos y uní mi frente con la suya.
-Solo te voy a pedir una cosa -ella asintió- no sé que va a pasar más en un tiempo más, no sé si vamos a volver a encontrarnos.. -me quedé en silencio observándola por unos minutos- quizás ambos encontremos el amor en otras personas, quizás seamos felices con esas personas, quizás ni siquiera sepamos donde estamos, pero quiero que me prometas algo.. -le pedí y ella asintió sin dejar de llorar- que a pesar de todo lo que pueda pasar en el futuro, siempre me vas a recordar.
Lali sonrió y se mojó sus labios.
-Siempre lo haré -susurró-
Sonreí y me acerqué a su boca, rozando mis labios con los suyos.
-Yo también lo haré.
Y apoyé suavemente mis labios contra los suyos. La besé lentamente, con delicadeza  cuidando cada segundo de aquel besó. Mi lengua jugaba pasivamente con la suya, sentía ese sabor tan único de ella, disfrutaba sus carnosos labios, disfrutaba su manera de besar, con tanta sutileza y alocada a la vez.
Agarre su cuello y cambié el sentido del beso, ahora lo profundizamos aun más, ahora simplemente me la comía con desesperación, pasión y un poco de dolor.

Fin del Flashback.

-Bombón! ¿que haces?.
Y Fernanda me había hablado por la ventenita del chat de facebook.


Continuara...