13 de abril de 2013

Capitulo Cienco Cincuenta y Uno.

'Volver a Respirar'
Capitulo 151.

Lunes y Martes pasaron sin problema alguno, días tranquilos que hace mucho no tenía. Hoy, Miercoles, Tomas tenía una presentación por el aniversario de su colegio. Sali antes del laburo y me encargue de arreglar a mi hijo, luego me arregle yo y a eso de las siete de la tarde partimos al colegio en compañia de Rocio.
-¿Estás nervioso?
Le pregunté a Tomas quien no paraba de mover sus manos mientras miraba la presentación de sus compañeros de otros cursos.
Tomas me miró con algo de preocupación y habló.
-Papá aun no llega.
Suspiré, eso era lo que lo tenía nervioso.
-Ya va a llegar, de seguro se retraso en el laburo -acaricié su cabello-
-¿Y si no viene? -preguntó preocupado-
-Va a venir -aseguré-
-Él me lo prometio -acotó-
-Ya va a llegar, tranquilo hijo -besé su mejilla-
Pasaron algunos minutos hasta que al fin llegó Pablo, pero no vino solo, una chica morocha y delgada lo acompañaba tomando su mano.
-Papá!!!! -gritó Tomas al verlo-
Él sonrió y abrio sus brazos para abrazar a nuestro hijo. La chica los miraba muy eternecida, sin borrar su sonrisa.
-Pensé que no venías -exclamó Tomas-
-Nunca te dejaría solo campeón -aseguró Pablo-
Y si, básicamente era cierto. Pablo a pesar de todo, había resultado ser un buen padre. Le costo, muchisimo pero lo logró.

Llamaron a los de segundo año, ahí iba mi hijo. Luego del abrazo con Pablo, él de inmadiato corrió a mis brazos.
-Mucha suerte hijo, te va a salir excelente mi amor -lo llené de besos-
-Te amooo -me gritó-
-Yo más!
Le di un último besó y se fue junto a sus compañeritos y su profesora.
Pablo quedó volvió a tomar la mano de la chica y se acercó a saludarnos con un besó en la mejilla a Rochi y a mí.
-Ella es Luciana, mi novia -sonrió casi enamorado- Lu!, ellas son Lali, la mamá de Tomas y Roció, su amiga.
-Hola -dijo amable, y choco su mejilla derecha con la mía y la de mi amiga-
Los cuatro sonreímos y volteamos hasta el escenario. En minutos salió Tomas, y actuó de un marinero a cargo del barco principal. Lo hizo perfecto!.
Nos quedamos al pequeño coctel que ofrecia el colegio, Tomas no paraba de hablar en como le salió su actuación, y todos reíamos, era un chiste mi hijo.
Mi telefono sonó, miré la pantalla y sonreí inevitablemente. Peter me estaba llamando.

-¿Si? -contesté mientras me alejaba un poco-
-Dos días y te veo -contestó él-
-Casi lo olvidaba -bromeé-
-Mentirosa -rió-
-Un poco -reímos-
-¿Donde estás? -me preguntó curioso-
-En el colegio aún.
-¿Como le salió la presentación a Tomi? -preguntó interesado, le había contado ayer-
-Perfecta, se lució -dije orgullosa-
-Y era obvio, el talento lo heredo de su mamá -aseguró tierno-
Reí.
-No me chamulles -le advertí riendo-
-No lo hago -rió-
-Boee.. ¿todo bien hoy? -le pregunté cambiando el tema-
-Sí, un poco flojito el día pero todo bien -respondió-
-Me alegro -dije algo timida-
-¿Y el tuyo, que tal? -preguntó-
-Bien, algo familiar -reí-
-Falté yo nada más -dijo riendo-
-Pronto.. -aseguré-
-¿Si? -preguntó él esperanzado-
-Si todo sale bien -contesté nerviosa-
-Va a salir bien -aseguró-
-Vos tenes cosas pendientes -le recordé-
-Es solo una charla, la última -me explicó-
-Y esta bien, pero recordá que las cosas también necesitan tiempo para salir bien.
-A veces no necesitan tanto tiempo -me contradijo-
-Peter, me refiero a que no nos tenemos que apresurar -suspiré- quiero ir con calma, quiero que cada uno nos demos el tiempo de cerrar cada historia ¿me entendes?
-Entiendo -aseguró-
-Vos sabes que estamos jugando al todo o nada ¿no? -le cuestioné-
-Si, y obviamente quiero ganar -contestó serio-
-Entonces, cuidemos esto que recien esta volviendo a empezar ¿si?
-Si -suspiró-
-No quiero arruinarlo otra vez -aseguré-
-No tengas miedo La.
-Es inevitable -respondí-
-Bueno, si. Pero recorda que ambos nos estamos arriesgado, no solo vos -me recordó-
-Lo tengo claro -ví que todos se estaban empezando a ir-
-Quiero volver a conocerte -habló y mi mente se quedó pegada en su voz- sé que hemos cambiado un poco y creo que lo mejor sería...
-Empezar desde el cero -lo interrumpí, terminando la frase- lo sé.
Pude sentir su risa de satisfacción.
-Entonces, no dudemos tanto -agregó-
-Tenes razón -tome airé- boee.. todos se están llendo, asi que.. hablamos más tarde.
-Te llamo para darte las buenas noches -acotó-
Sonreí aunque él no me pudiera ver.
-Lindo, un beso en la mejilla para vos -reí-
-Y otro el frente para vos -me respondió él riendo-
-Nos vemos el viernes.
-Ajam.. cuidate mucho y saludos a Tomas.
-Dale, chau.
-Chau mi morochita.
Sonreí y corté. "Mi morochita" ay diossss, este chico me quiere volver aun más loca.

Cuenta Peter.

Jueves.
Me levanté con ánimo, anoche había soñado con Lali, y ya solo quedaba un día para verla. Si, estaba como un pendejo quinceañero pero ¿que más daba? estaba loco por ella.
La mañana en la clinica se pasó demasiado rapido, a la hora del almuerzo, bajé al casino y como nunca, me encontré a Fernanda. Ella me regalo una fría mirada, casi con odio y volvió a charlar con su novio, Mauricio.
Que loca estaba, ella se había alejado cuando comencé a tener algo evidente con Sara, Fernanda se molestó, me grito un par de cosas y no me habló nunca más. Lo malo es que tenía que verlaen la clinica, ya que ambos laburabamos acá, pero por mi suerte, a ella siempre la mandaba a diferentes consultorios o secciones, no la veía mucho. De seguro me debe odiar porque nunca la registre, siempre la vi como una amiga, y porque a pesar de que siempre estuvo buenisima, no me importaba en lo más minimo chaparmela alguna vez.

La tarde se hizo aun más rápida, revise algunos casos y me fui a casa.
Me duche, y sali a lo de Cande -que vivia con Javier-, me habían invitado a cenar. Organizaron una comida para el sábado, algo incomodo porque sabía que entre los invitados iban a estar Lali y Sara. Pero tenía tiempo para pensar en como llevar la situación, a demás mañana iba a ver a Lali, asi que eso me daba un poco más de relajo.
Llegue a mi departamento a eso de las doce de la noche, me preparé un té y me fui a la cama. Le mande un mensaje a Lali de buenas noches y me dormí.

Viernes. Abri los ojos y sonreí.. al fin, querido y esperado viernes, llegaste.

Continuara...