4 de junio de 2013

Capitulo Cinto Sesenta y Cinco.

'Volver a Respirar'
Capítulo 165.

Cuenta Peter.

-No digas eso -musité-
Tomé su rostro entre mis manos y me acerqué a su boca pegando mi frente con la suya.
-Ellos no te pudieron conocer bien, nos saben muchísimas cosas de vos -acaricié sus mejillas- no saben lo hermosa persona que sos y ni se imaginan lo feliz que me haces.
Me miró fijamente por algunos segundos hasta que un par de lágrimas cayeron de sus ojos.
-No llores preciosa.
Enredé mis brazos en su cuerpo y la abrasé tiernamente, ella reposo su cabeza en mi hombro mientras yo acariciaba su cabello.
-Ya van a tener tiempo de conocerte bien, y te aseguró que te van a amar -aseguré-
-¿Y si no es así? -me miró-
-No va a ser así -aclaré- ¿te acordas que antes Cande también te odiaba? -le dije divertido y ella asintió riendo suavemente- ¿y ahora? te ama! -exclamé-
-No tan así -río-
-Si, así es, sos la mejor amiga del novio y siempre estuviste presente en su embarazo.. te aseguró que te ama -sonreí-
-Pero tu vieja es distinta -aseguró-
-No, es loca pero hay que darle tiempo nada más -acaricié su mejilla- además, yo te amo muchisisisisisimo y con eso basta -dije tierno-
-A veces no basta tan solo con eso.
-¿No? -le pregunté haciendo un puchero-
-No, la familia también influye mucho -musitó-
-Si pero estoy seguro que en cuanto ellos sepan lo mucho que te amo y loco que estoy por vos, te van a amar -me acerqué a su boca- y van a notar que estoy enamorado de vos, y que sos el amor de mi vida, y que sos mi felicidad.
Sonrió, y junté suavemente sus labios con lo míos.
-Te amo -dijo contra mis labios-
Sonreí y la besé.
-Te prometo que voy a arreglar las cosas ¿si? -le dije mientras acariciaba su cintura-
-Si -sonrió-
-Sos lo más lindo que tengo y quiero que te sintas cómoda en todos lados.
-Lindo -sonrió- te amo mucho -me abrasó-
Estuvimos unos minutos más disfrutando de nuestro amor, sin hablar más del tema, solo disfrutando de la hermosa mañana.

Al salir de la ducha me di cuenta que Lali no estaba en la habitación, me vestí algo rápido y salí a la sala, ahí estaba mirando tele mientras me esperaba para irnos.
Nos subimos al auto y maneje hasta la casa de la mamá de Roció. Ahí estaría Tomas.
-Lali -la llamé mientras manejaba-
-Decime -habló mientras despegaba la mirada de su celular y me miraba-
-Tengo una duda.. -dije un poco nervioso-
-¿Una duda? -preguntó curiosa y yo asentí- ¿cuál?
-¿Vos te cuidas cierto? -le di una rápida mirada-
Mordió su labio y rio.
-Ya se me hacía raro que estuvieras tan tranquilo -río-
-Es solo una duda, anoche no usamos protección -le recordé-
-Si me di cuenta Lanzani! -exclamó divertida- y sí, me cuido -sonrió- tomo mis pastillas diarias, no te preocupes, no te voy a encajar un hijo -rió-
-No -reí- no me preocupaba por eso, es más, tener un hijo con vos está en mi lista de sueños -acoté-
-No te creoo -rio-
-Enserio -reí- sos la única mina que tuve en la vida con la que me gustaría ser padre en cualquier momento.
Paré en un semáforo en rojo y la miré. Ella sonrió tierna, acercó su mano a la mía que estaba en la palanca de cambió y la acarició.
-Sos tan tierno -habló- a mi también me gustaría tener un hijo con vos -sonreí- pero todo a su debido tiempo ¿si? -asentí-
-Pero la invitación a tener un hijo juntos esta echa eh! -le advertí riendo-
-Lo voy a tener en cuenta siempre -me guiño el ojo-

 Recogimos a Tomas, y los llevé a su departamento. Les prometí volver dentro de la tarde y luego maneje hasta lo de mis viejos.
Estacioné afuera de la casa y me bajé con suma tranquilidad, abrí las puertas con mis llaves y entre a casa, habían unas cuantas personas, entre ellas los padres de Sara. Mierda.

-Mira Juanpa, llego el tioo! -le dijo Cande a su hijo-
Sonreí y me acerqué a ella, la saludé y tome de inmediato a mi sobrino en brazos.
-Hola campeón -lo llené de besos- aaah pero mira que facha que te sacaste ahijado! -le dije mientras lo miraba, él solo reía y trataba de hablar-
-Está feliz de verlos a todos -exclamó Cande-
-Si, lo veo lo veo -reímos-
-Hace mucho que no estábamos todos así de reunidos -aseguró-
-¿Y sabes para qué es? -le pregunté curioso-
-Ni idea -levantó los hombros- también vinieron los padres de Sara -dijo un poco incomoda-
-Así veo -subí mis cejas-
-¿Te molesta? -me preguntó interesada-
-Me da igual -suspiré- a menos que vengan a joderme a mí con Sara o...
-No lo creo -me interrumpió Cande-
-Yo no me iría a meter a la casa de mi ex -aseguré-
-¿Entonces anoche no te fuiste al departamento de Lali? -me preguntó sonriendo con picardía e interés-
Reí, y acomodé a mi sobrino entre mis brazos.
-¿Porque lo preguntas?
-Porque te fuiste con ella y temprano -dijo aguantándose la risa-
-Apaa, ¿me estabas vigilando hermanita? -le pregunté riendo-
-No, pero todos se dieron cuenta.
-Se sentía un poco mal y me ofrecí a llevarla, eso es todo.
-Claaaaaaa! -rio- ¿y porque no volviste?
-A boee! yo ni enterado que te tenía que estar dando explicaciones por todo lo que hago eh! -me quejé-
-No -rio- no se trata de eso pero a todos nos pareció extraño ósea.. Lali es tu ex, y encima terminaste hace poco con Sara que también estaba ahí y..
-No sigas Candelita, sé a lo que vas y no me interesa lo que digan todos -sonreí-
-Yo solo quiero verte feliz Peter, vos sabes que te apoyo siempre -sonrió- y te banco pero tenes que tener las cosas claras.
-Las tengo clarísimas, nunca había estado tan seguro de nada en mi vida -aseguré- y soy feliz así, me siento bien, y creo que con eso basta, ahora vos me apoyas o te vas a otro lado porque no quiero que rompas las pelotas!
-No -sonrió- obvio que te apoyo boludo, sos mi hermanito y vos siempre me apoyaste en todas mis cagadas.. -sonreí- y si estás feliz, voy a estar feliz con vos.
-Me parece bien -reímos-

Entre a la sala y saludé a los presentes, entre ellos Sara. Mamá rápidamente fijo la mirada en mí mientras charlaba un poco con los padres de mi ex.
Vi a Papá y me acerqué a saludarlo, hace un par de semanas que no lo veía. Charle con él unos minutos hasta que anunciaron que la comida estaba servida, todos salimos al jardín y nos sentamos alrededor de la mesa. Me senté al lado de mi cuñado.
-Ojito vos con mi nena eh -me advirtió Javier-
Reí, sabía que se refería Lali.
-¿Que nena? -me hice el desentendido-
-Lalita -sonrió- yo sé que algo pasa por ahí -rio-
-No mucho la verdad, no me da bola -reí-
-Por lo mismo anoche se fueron juntos -exclamó-
-Coincidencias de la vida -dije riendo-
-No enserio man, vos sabes cuánto la quiero a la petisa y cuanto ha sufrido también -asentí- y si pasa algo, cuídala.
-Siempre la he cuidado más que a mi vida -aseguré- y esta vez no va a cambiar.
-¿Ósea que están?
-Ella te debería contar esto ¿no? sos el mejor amigo -dije mientras tomaba un poco de comida-
-Así dice pero esa petisa se escode todo ahora! -reímos-
-Ya te lo va a contar, tranqui bro
-¿Pero enserio, están? -preguntó sorprendido-
-Estamos pero hermano, no se lo digas ni a Cande! -le advertí-
-Si boludo -sonrió- y te felicito eh, te la jugaste a todo -dio una rápida mirada a Sara-
-Era ahora o nunca -suspiré-
-Lo bueno es que con Sara quedo todo bien ¿no? -preguntó-
-Algo, al menos podemos convivir sanamente -reímos-
-Ei, ¿qué tanto hablan ustedes dos? -se metió Cande del otro lado-
-Cosas de hombres mi amor -la abrasó Javier-
-Claaa, hombres -rio burlándose-

La comida transcurrió sanamente, fue tranquila y no hubo mayores sorpresas. Vi a Sara varias veces mirándome, como queriéndome a hablar pero no lo hizo. Luego estaba Mamá quien miraba cada uno de mis actos, estaba casi creando una incómoda tensión entre ella y yo.
Cuando todos terminamos de comer, papá se levantó y toda la atención se centró en él. Hablo un par de cosas de sus negocios y luego dio la noticia que todos esperábamos.
-Desde el próximo mes, la empresa va a estar ligada completamente a la familia López -la familia de Sara- tenemos más de dos proyectos listos y vamos a hacer unos cuantos viajes a Londres, sobre todo ahora que se integra alguien más a la gerencia -miro hacia nuestro lado- mi yerno, Javier -sonrió y este lo imitó- y bueno, también por obviedad se integra Oscar -el padre de Sara- con el cual vamos a ser socios, y también vamos a tratar de agrandar la empresa..

Suspiré con cierta molestia, lo único que me faltaba era que mi viejo se halla echo socio-amigo del padre de Sara. ¿Algo más terrible? iba a tener que soportar los ataques de mi vieja por querer que vuelva con Sara por algún tiempo más, y encima la iba a tener que ver de por vida. Esto no me estaba gustando.
Mi viejo terminó de hablar luego de unos cuantos halagos a Oscar, y la atención se alejó de él. Tome mi celular y le marque a Lali, pero no contestó así que le deje un mensaje.
'Definitivamente mi familia esta un poco loca ajajaj avísame cuando estés disponible para ir a verte amor, TE AMO linda'
Me levanté de la mesa diciendo 'permiso' y salí de ahí. Estaba algo confundido, era raro que papá se hiciera socios, así que me imaginaba que esta había sido una decisión que lo tomo un buen tiempo aceptar.

-¿Podemos hablar un poco? -me preguntó una suave voz-
Me giré y la vi a Sara para en frente del sofá. Mi celular sonó y lo vi rápidamente, era Lali.
'Veni ahoraaaa!! jajja si podes claro, te amo maaaas'
Sonreí inevitablemente y le respondí.
'Ya voooooy, espérame con muchas ganas de llenarme de besos ¿sí?'
Me encantaba, simplemente.
Recordé que estaba Sara ahí y levante mi vista para mirarla. Se vía algo incomoda, molesta, rara.
-Discúlpame, me tengo que ir -me levanté-
-Ah, está bien.. -tosió un poco-
Camine hasta ella para despedirme pero ella se negó.
-Necesito sacarme esta duda tremenda que me está matando -me dijo algo nerviosa-
-¿Qué cosa? -le pregunté sorprendido-
-¿Volviste con tu ex verdad? -me preguntó seria-
Trague saliva y suspiré incomodo ante su pregunta.
-No sé qué respuesta queres escuchar -musité algo descolado-
-La verdad.
-Entonces, si, digamos que estamos en eso...
Aseguré frio, sin pensar en nadie más que yo.
Ella bajo su mirada con un delicado suspiró.
-Me tengo que ir -dije mientras me alejaba un poco de ella- cuídate ¿sí? -asintió- y..
-No me digas nada más -susurró y camino en dirección al baño, sin mirarme-
Suspiré y me sentí bien dentro de mí.
Yo estaba seguro de lo que hacía, sobre todo porque lo más que quería en esta vida era estar con Lali y ya no me importaba lo que dijeran los demás. La amaba y no había motivo realmente importante para negar que estaba con ella.

Continuara...