Capitulo Ciento Setenta y Cinco.

'Volver a Respirar'
Capítulo 175.

-Solo 24 horas -me recordó Peter mientras dejaba varios besos en mi boca-
-Mmm.. si -sonreí y lo besé cortamente- estoy tan feliz! -exclamé rozando mi nariz con la suya-
-Yo también -dejo un piquito en mis labios y se alejó-
-No sabes las ganas que tengo de verlo, de abrazarlo, de darle miles de besos y no soltarlo nunca más! -dije feliz-
-Ya queda poco amor -sonrió y acarició mi panza- ¿cómo pensas que va a tomar lo de tener un hermanito? -me preguntó algo preocupado-
-Bien, yo creo.. -lo miré y él encarnó una ceja- Tomas es grande y quizá al principio le cueste acostumbrarse a la idea de que ya no va a ser solo él, sino que va a haber alguien más pequeño pero te aseguró que luego le va a encantar -acaricié su mejilla- va a estar tan feliz como nosotros mi amor.
-Espero -sonrió-
-Así va a hacer -apreté su mejilla-
Peter me abrazó, puso su cabeza en mi pecho y yo acaricié su cabello.
-No puedo creer que falten cinco meses para conocer a nuestro hijo -murmuró-
-Y mira lo rápido que está creciendo! -exclamé mientras le señalaba mi panza-
-Va a ser la cosita más linda del mundo -se acercó a mi panza y la besó- igual que vos -me miró y yo sonreí-
-Te amo Peter -susurré-
Él se acercó a mi boca y choco nuestros labios.
-Te amo más -aseguró y me besó-

Ya estábamos a solo un día de que Tomas volviera a Argentina, estos tres meses se habían pasado muy rápido. Mi panza había crecido bastante y ya estaba de cuatro meses, al próximo mes dejaba de laburar y de estudiar, así que iba a estar más relajada.
Hace un mes estábamos viviendo juntos en un departamento nuevo. Pensé que la convivencia iba a ser un poco más difícil pero en este mes que llevábamos, no hemos tenido ni un problema.
Hoy era Domingo e íbamos a ir a comer a lo de la familia de Peter. Estaba nerviosa como todas las otras veces, pero con la diferencia de que ahora estaba segura de que los Lanzani me aceptaban, me querían e incluso veían proyección en nosotros. Lo único que aún no estaba del todo bien era la mamá de Peter, nos llevábamos bien, charlábamos un rato pero no aún faltaba algo para que la relación fuera del todo buena.. quizás con el tiempo nos vamos a ir ablandando ambas.

-Qué bueno que llegaron! -exclamó el padre de Peter- ¿cómo estás Lali? -dijo sonriente-
-Bien, bien ¿y usted? -le pregunté amable-
-Bien, como siempre, descansado de los problemas de la semana -reímos-
Entramos a la casa y saludamos a Cande, Javier, y JuanPa, el chiquito estaba bastante grande y en la etapa más deliciosa. Lo tome de inmediato y junto a Peter nos pusimos a jugar con él mientras Cande y Javier reían y adoraban el momento.
La mamá de Peter apareció unos minutos después en la sala y nos saludó bastante amorosa, se quedó un rato charlando y luego se fue a la cocina.
A pesar de todo no era tan bruja como se veía, había que darse el tiempo de conocerla y aceptarla.
La comida estaba servida y todos nos fuimos al comedor, el ambiente estaba cálido, había una buena armonía.
-Así que mañana al fin llega tu hijo -me habló la mamá de Peter-
-Si -respondí- después de tanto tiempo, al fin lo voy a ver -sonreí-
-Y lo vamos a poder conocer -musitó-
-Obvio que si -aseguré-
-¿Cuántos años tiene? -preguntó mi suegro-
-7 años -contesté-
-Y no sabes lo tierno y lindo que es -acotó Peter- se van a encantar con él, es un capo.
-Tanto así que se cree que es grande y quiere que lo tratemos como grande -agregó Javier-
-Ei! no tan así! -lo reté y todos reímos-
-Y habla mucho mucho mucho -musitó Candela-
-Y es igual a Lali, es un lalito -aseguró Peter y todos reímos-
-Espero que lo traigas a casa en la semana -me habló mi suegro-
-Sí, claro -sonreí-
-¿Y ya sabe que va a tener un hermanito? -preguntó mi suegra-
-No, aun no -tome un poco de agua- con Peter pensamos que sería mejor decírselo cuando estuviera acá.
-Encima igual se va a dar cuenta, cuando se fue, su mamá era flaquita y ahora mira la panza que tiene -exclamó Peter-
-Estoy igual, pero con un poquito más de panza nada más, exagerado -reímos-
-Es que yo te veía siempre tan flaquita mi amor -me abrasó- pero ahora te ves más linda con esa pancita ¿sabes? -besó mi mejilla-
-Aaaay! que empalagosos los morochos -se quejó Candela y todos reímos-

Estuvimos toda la tarde ahí, riéndonos, charlando, compartiendo.. La verdad es que la manera en que habían cambiado las cosas desde que dijimos que íbamos a ser padres, era muy buena, creo que faltaba esto para unirnos y darnos el tiempo de ellos me conozcan y yo a ellos.

-
Lunes, 10 am. y el vuelo que llegaba de Londres había llegado. Mi ansiedad aumento, quería verlo, abrazarlo y no soltarlo más.
Peter me abrazaba fuertemente mientras veía a un montón de gente salir, mi mirada lo buscaba desesperada y nerviosa, hasta que lo vi. Venia de la mano de la novia de Pablo, me levanté rápidamente y casi corrí hasta su lado.
-Tomas! -lo llamé-
Me miró y corrió hasta mí. Me agache y lo abrasé tan fuerte como si no lo hubiese visto en años.
De nuevo estaba conmigo, después de insoportables 4 meses sin él, nuevamente lo tenía junto a mí, abrazándome, diciéndome te amo y escuchando su respiración.
-Mi amor! -dije entre lágrimas-
-Mamá -besó mi boca- te extrañe mucho mamá -me abrazó- no quiero dejarte nunca más -dijo tierno mientras le salían algunas lagrimitas-
-Yo menos amor, nunca más te alejes de mi hijo -besé su frente- te extrañe tanto tanto! pero ya te tengo acá de nuevo -sonreí- y no te voy a dejar ir más -sonreímos-
-Te amo mamaa! -me abrasó-
Estuvimos unos segundos más abrazados, hasta que nos separamos, él de inmediato se fue a abrazar a Peter y yo saludé a Luciana.
-¿Como la pasaron? -pregunté interesada-
-Muy bien, disfrutamos mucho pero también él te extraño un montón! -aseguró tierna-
-Sí, yo también no sabes cuánto sufrí por no tenerlo estos meses -mordí mi labio inferior- ¿cómo se portó?
-Bien, Pablo trató de darle todo lo que Tomas quería -sonrió- pero tu hijo es un amor, hiciste un muy buen trabajo al criarlo.
-Gracias -reí- y también gracias por cuidarlo, yo sé que no es fácil tener a cargo a alguien que es externo a tu familia.
-No te preocupes, Tomas es el hijo de mi novio y por eso, ya lo tomo como parte de mi familia -aseguró-
-Que tierna -exclamé y ambas reímos- ¿el viaje como estuvo? -pregunté-
-Bien, tranqui, Tomas durmió todo el vuelo.
-¿Queres ir a comer con nosotros? -la invité-
-¿Enserio? -preguntó sorprendida-
-Si, es lo mínimo que te puedo ofrecer luego de haber cuidado a mi hijo cuatro meses! -sonreí-
-Dale, gracias.

Minutos después nos fuimos al auto de Peter, Tomas se fue sentado en mi regazo, estaba tan lindo, tan grande, lo veía tan hombre.. No quería dejar de abrazarlo y darle besos, era mi chiquito, y no podía vivir ni un día más alejada de él.
Tomas habló todo el camino, contó varias cosas, se le notaba feliz y yo me quedaba tranquila.
Llegamos a un restaurante y pedimos una mesa. Luciana era una buena chica, y se notaba lo feliz que hacía a Pablo, le tenía confianza y me parecía que con ella, se iba a quedar Pablo.


Continuara...

Chiquiturrisssss jajajaja, la nove termina en... 5 capitulos más :((( buuuuuu, que mal no? jajaj, si, hasta el 180 nada másss PERO voy a hacer la otra nove, va a ser diferente a todas akjsskajka voy a poner todo de mi imaginación, y la voy a hacer más loca :) jajaj Las quiero muchoooooo y leo cada uno de sus comentarios, GRACIAS POR SIEMPRE LEER! besitooos.
@Chilelaliter