4 de septiembre de 2012

Capitulo Ochenta y Siete.

"Volver a Respirar"
Capitulo 87.

Volvimos al grupo, la mayoría no notó nuestra ausencia porque ya estaban un poco al pedo pero los otros que aún estaban conscientes si se percataron que habíamos desaparecido por lo menos una hora.. Romina junto a Jessica se acercaron a mí y luego de darme un trago me empezaron a joder, yo solo reía y no les negué en ningún momento que lo había pasado muy bien.
La fiesta seguía, la música explotaba, la gente estaba descontrolada, el alcohol de a poco iba haciendo efecto y la sensación de sentirme tan segura de mi misma se sentía muy satisfactoria, esta disfrutando la noche como hace muchos años no hacía, estaba volviendo a sonreír con un tan solo bailar, estaba volviendo a respirar.

Abrí mis ojos y lo primero que vi fue el torso de Peter, subí mi vista y lo vi a él durmiendo, sonreí estúpidamente y acaricié su mejilla.. Él no tardó en mover su rostro y abrir sus ojitos, al verme sonrió y con el brazo que me rodeaba acarició mi espalda.
-Buen día -habló con su voz ronca-
-Hola -sonreí-
-¿Dormiste bien? -me preguntó tiernamente-
-Y tengo un leve dolor de cabeza pero estoy feliz por despertar junto a vos -sonreímos-
Nos acercamos un poco y nos besamos cortamente.
-Hoy quiero tener una noche solo con vos -me abrazó-
-¿No queres salir con tus amigos? -le pregunté sorprendida-
-Quiero estar con vos -volvió a repetir- ¿vos no queres acaso?
-Y yo... -lo miré dudando y luego reí- yo quiero estar todos los días de mi vida con vos -dije tierna-
-Sos hermosa hermosa hermosa -tomo mi rostro- te amo mucho.
-Yo más.
Lo besé cortamente hasta que mi celular sonó.
-Maaaa! -habló Tomas a través del celular-
-Mi amor! -exclamé feliz al escucharlo- ¿como estás precioso?
-Bien, eh comido mucho y estoy casi todo el día en la pilee! -dijo feliz-
-Que bueno mi amor, me encanta que te diviertas!
-Si pero te extraño!! ¿porque no venís? -me propuso tiernamente-
-Me encantaría pero vos sabes que no se puede hijo...
-Ahhh -dijo triste-
-Pero ya sabes que cuando volvas vamos a irnos de vacas unos días ¿si? -le recordé-
-¿Con Peter? -preguntó feliz-
-Si con Peter! -afirmé-
-Wiiiii!! ya quiero volver! -exclamó-
-Lindoo! ¿te han tratado bien? -le pregunté preocupada-
-Si, todos me adoran -dijo creído-
-Ay boeee! a él todos lo aman -me burlé y reímos- vos solo te tenes que portar bien eh! -le recordé-
-Si, Maaa..
-Te amo muchoo hijo -le dije tiernamente- y te extraño mucho también.
-Yo tambien te amooo! -gritó-
-Boee! extrañarme eh! -le advertí-
-Si Maa!.. te amoo -volvió a repetir-
-Te dejo seguir disfrutando, a la noche hablamos.. te amo mucho, cuídate hermoso mio!
-Si vos también cuidate, saludos a Peter!! -dijo feliz-
-Dale dale, besitoooos! chauuu.
-Chauuu maaa!
Finalizamos la comunicación y rápidamente miré a Peter.

-Lo extraño tanto -admití-
-Yo también -aseguró-
-Extraño sus locuras -volví a recostarme sobre el pecho de Peter-
-¿Lo está pasando bien? -me preguntó-
-Sí, te mando saludos -sonreí-
-Es tan tierno igual a la madre eh!
-Claaa! igual -reímos-
-Boee me voy a levantar porque ya es re tarde -hablo Peter-
Y claro eran casi las cuatro de la tarde, eso quiere decir que la noche estuvo muy buena y muy loca.
Nos levantamos, nos duchamos y a eso de las las cuatro y media bajamos, comimos algo y luego nos fuimos a la playa en donde estaban todos.

Cuenta Peter:

Estábamos en la playa, las chicas estaban tomando sol mientras que yo estaba jugando a las paletas con los chicos.. Al ir a alquilar más reposeras inesperadamente me encontré con la amiga de Lali, María.
-Peter! -exclamó la rubia-
-Hola -sonreí y besé su mejilla-
-¿Que haces por acá? -me preguntó alegremente-
-Nada, vine con Lali y unos amigos a disfrutar unos días..
-¿Lali también vino? -dijo sorprendida-
-Si si, esta por allá.. -señale un lugar de la playa-
-Ah! podríamos juntarnos ¿no? yo me quedó acá hasta unos días más.. -propuso-
-Claro que sí.. ¿con quien viniste?
-Con unas amigas.. -sonrió mientras se tocaba el pelo-
-Ah dale -sonreímos-
-¿Me ayudas con las reposeras please? -me pidió-
-Dale..
Eran cuatro reposeras y fue casi imposible decirle que no, estaba sola ahí y obviamente no se iba a poder llevar las cuatro, así que decidí ayudarla.

Continuara...