24 de octubre de 2012

Capitulo Ciento Siete.

"Volver a Respirar"
Capitulo 107.

-No quiero traerte problemas -aseguró Pablo-
-No tranquilo -lo miré- ¿como está tu mamá? -le pregunté preocupada-
-Mal, se a echo un montón de examenes y nada... -suspiró- es terrible verla sufrir, vos sabes que yo daría mi vida por ella y..
-Tenes que estar tranquilo nada más -acaricié su espalda- capaz que ya encuentren alguna cura o algo.
-Eso es lo que más deseo -agregó-
-Tenes que cuidarla, acompañarla en todo y hacerla sentir bien en cada momento -le aconsejé- le hará bien saber que vos estas siempre ahí.
-Trató de estar siempre ahi pero a veces es imposible.. me da tanta pena verla así.
-¿Hace cuanto que se lo detectaron? -le pregunté-
-Hace ya casi un mes.. pero esta avanzado, yo creo que pronto tendremos que internarla.
-No pienses en negativo Pablo! -exclamé- tenes que pensar siempre en positivo y relajarte, así le das tranquilidad a ella -aseguré-
-Es lo que hago pero entendeme a veces es complicado.
-Lo sé -suspiré-
-Gracias Lali -lo miré- a pesar de todo vos estás y..
-Siempre estaré -interrumpí-
-Gracias -esforzó una sonrisa pero no lo logró-
-¿Vas a llevar a Tomas a ver a tu mamá? -le pregunté-
-Si, un rato.. ¿puedo?
-Si obvio, pero traemelo temprano ¿si? -me levanté-
-Si si..

Busqué a Tomas quien ya estaba casi listo para salir con su Papá, volvimos al living y Pablo seguía igual de desganado.
-Ánimo, y fuerza -acaricié su hombro cuando ya estabamos en la puerta del edifició-
-Gracias, enserio.
-Cuidate y saludos a tu mamá -besé su mejilla y luego abrasé a Tomas- portate bien ¿sí? -él asintió- cuidala a tu abuela -volvió a asentir- te amo.
-Yo también Ma! -me abrasó, besó mi boca y se tomo la mano de Pablo-
-Cuidensé.
Subiron al auto y arrancaron tranquilamente. Mordí mi labio inferior y antes de entrar al edifició senti la bocina del auto de Peter, volteé y sonreí al verlo.
-¿Que haces acá? -me preguntó extrañado-
-Pablo vino a buscar a Tomas un rato -respondí-
-Ahhh... -me tomó de la cintura- y yo te vengo a buscar a vos -dijo tiernamente-
-¿Donde me queres llevar? -sonreí picara-
-No sé, pero te necesito -hizo un puchero-
-Yo también -lo abrasé y besé su cuello- mucho -aseguré-
-Ahora no tenemos mucha privacidad aquí -se lamentó- pero sabes en donde si tenemos privacidad -yo negué- en mi cuarto -reí-
-Están tus papas mi amor -aseguré-
-No, salieron y van a llegar muuuuuuy tarde -sonrió picaro-
-¿Y tu hermana? -pregunté sonriendo-
-Tampoco está.. osea que mi casa y en especial mi cuarto nos estan esperando -movió sus cejas de arriba para abajo-
Yo reí, besé su boca y termine mordiendo su labio inferior.
-¿Vas? -me preguntó al oído-
-Imposible negarme -susurré-

Nuevamente besé sus labios pero esta vez lo corté para luego caminar hasta el ascensor.
Llegamos al departamento, preparé un bolso y toqué la puerta de Roció.
-¿Vas a salir? -le pregunté al verla sentada frente al tocador-
-No creo -me miró- ¿vos?
-Sí y necesito que me hagas un favor please! -le pedí-
-Esta bien, yo cuido a Tomas -sonrió-
-Graciaaaaas! -la abrasé-
-Pero quizás alguien me acompañe a cuidarlo -acotó-
-Apaaa! ¿rulos, rubio, musculoso? -pregunté riendo-
-Quizás... -reímos- va a venir a visitarme un rato.
-Ay! que lindo -sonreí- pasala muy muy bien -le dije en doble sentido-
-Boluda, a penas nos tocamos la mano -reímos-
-Claa! pero hoy mepa que chapan -dije riendo-
-No sé.. -reímos- ¿Y vos para donde vas? -me preguntó curiosa-
-Peter me vino a buscar para estar un ratito juntos.. prometo llegar -advertí-
-Esta bien, igual no te preocupes eh.. disfruta nada más -aseguró-
-Gracias amiga -besé su mejilla- te amo!
-Yo tambien boba. Pasenlo lindo y mandale saludos a tu noviecito.
-Al tuyo igual -bromeé-
-Claaa! -reimos-
Le tiré un beso y sali de su habitación, volvi con Peter, lo besé y bajamos hasta el auto.
-A que no adivinas quien va a venir a visitar a Rochi hoy -dije entusiasmada-
-Nico -sonrió-
-Si... son tan tiernos -reímos-
-¿Y como está Gastón? -me preguntó-
-Bien, superando... -levanté mis hombros y sonreímos-
-Te amo -dijo de la nada-
-Yo también.

Llegamos a su casa y tal como dijo él, no había nadie.. Aprovechamos de preparar algo para comer y luego nos sentamos en el living a ver una pelicula la cual no terminamos porque él me atacó con una enormidad de besos.
Lo necesitaba tanto, hace tanto que no haciamos el amor que rapidamente me subí arriba de él para comenzar a calentar el ambiente.
Su torso estaba más trabajado que nunca, sus perfectos labios me hacían olvidar toda la realidad, me llevaban hasta donde jamás podría estar. Lentamente fui sacando su pantalón. Sus piernas eran de temer, me encantaba todo de él.

Cuenta Peter:

Estar con ella, besarla, tocarla, sentirla, era maravilloso.. Sus labios, sus ojos, sus gemidos, su pelo, su respiración agitada, su perfecto cuerpo, TODO me encantaba, estaba casí hipnotizado y la necesitaba, necesitaba amarla, sentirla, y que ella me sintiera, necesitaba hacerla llegar a su climax, escuchar su orgasmo, escuchar gritar mi nombre cuando acabasé.
La levanté bruscamente pero sin dejar de tener contacto con ella, comencé a caminar hasta mi habitación, su cuello era mi debilidad así que trataba de atacarlo lo más que podía.. Me sentía en el paraiso.
Llegamos al cuarto y lo primero que hice fue tirarla a la cama, rebotó un poco pero la detuve al agarrar fuertemente su rostro y besarla apasionadamente. Quité su remera, y continuo a esto saque su corpiño lo más rapido que pude. Besé sus pechos, los masajeé y volví a su boca. Estaba totalmente excitado, pero quería seguir recorriendo su cuerpo.
Dando pequeños piquitos baje hasta su estomago, tome sus caderas y las movi, para luego sacar su pantalon en conjuto con su tanga. Hizo que volviera a sus labios, y luego pasó ella a estar arriba mió.

Cuenta Lali:

Bajé hasta su boxer, mire su bulto y metí mi mano adentro. Masajeé un poco a su amiguito y mientras él se retorcía de placer, saque mi mano para bajar por completo sus boxer. Deseé poder disfrutar su bulto un poco más pero Peter estaba muy caliente, me tomó de los brazos y me sentó arriba de él.
Pude sentir la penetración más rapida de mi vida, pero seguia siendo igual de placentera que las demás. Cuando al fin entró, los movimientos rapidos no comenzaron a aparacer, a Peter le encantaba que moviera mi culo sobre su bulto, le encantaba que mientras yo esté arriba yo tomará el mando de todo, y así lo hice. Él solo disfrutaba con cada movimiento, disfrutaba de mis gemidos, de mi sudor, de mi sexo.
Pero no paso mucho cuando él volvió a tomar el mando de la situación, me tiró a la cama, me abrió las piernas y entró fuertemente.
Dios, cuanto disfrutaba sentirlo y que fuera así de agresivo. Me encantaba. Me excitaba aun más.

-Ohhhhhhh Peter.... -gemí en su oído, quería hacerlo explotar-
-No volvas a hacerlo -dijo agitado-
-Ayyyyyyyyyyyyy! -grité fuertamente-
Sabia que todo lo proveniente de mi boca, le excitaba.
Los movimiento siguieron, la pasión se mantuvo, las ganas de seguir amandolo brutalmente siguieron hasta que cada uno llegó a su orgasmo, luego del climax la calentura bajó y comenzamos a hacer el amor tranquilamente, a disfrutar del placer, a disfrutar de cada movimiento, seguimos amandonos como si el mundo se fuese a acabar.


Continuara....


Se vienen capitulos inesperados.. CHANCHAN!. Gracias por leeeeeeeer (LL)!!

Capitulo Ciento Seis.

"Volver a Respirar"
Capitulo 106.

Cuarta semana de marzo, y mi estrés era del porte de una mansión. Estas cuatro semanas habían sido muy agitadas, había vuelto a la facultad mientras que Tomas estaba cursando su primer año de colegio y encima ya pronto se venía su cumpleaños. Seguía laburando ya que la plata que ganaba me venía muy bien para sobrevivir.
Roció definitivamente se quedó a vivir con nosotros y decidimos compartir los gastos, ya que pensabamos estar por mucho tiempo conviviendo juntas, también había terminado por completo su relación con Gastón, luego de que ella se fue del departamento que compartían charlaron un par de veces pero no funcionó, así que decidieron cortar por lo sano y quedar en buenos términos, quizás algun día vuelvan ¿quien sabe?.

-Este finde podríamos ir a la playa a relajarnos -acotó la rubia mientras cenabamos-
-No lo sé, Tomas tiene muchas tareas y yo también -tomé un poco de agua- si queres lo dejamos para cuando haya un fin de semana largo ¿te parece? -le propusé-
-Dale -sonrió- yo también estoy un poco estresada con la facultad y más ahora que volví a laburar -dijo algo cansada-
-Este año va a hacer de locos -aseguré riendo-
-Toda la razón, ya partió alocado -continuó la risa- che ¿Peter no viene?
-No, después de que salió de la facultad me llamó pero le dije que se fuera a descansar mejor.. -respondí- el pobre esta colapsado de trabajos y encima tiene que hacer la práctica -agregué-
-Uhhhh! va a ser pesado este año para el pelado eh -dijo riendo-
-Para todos -corregí y ella asintió-
-¿Has hablado con Gastón? -me preguntó un poco tímida-
-Ayer hablamos -comí un poco de pollo-
-¿Y...? -suspiró- ¿como está?
-Bien -tomé agua- me dijo que lo llamaron de una empresa a la que postulo y comienza a laburar la proxima semana -sonreí-
-¿Enserio? -dijo alegre-
-Asi es... esta demasiado feliz! lo hubieras escuchado -acoté-
-Me imagino -sonrió- me alegro mucho por él, mandale mis felicitaciones cuando volvas a hablar con él.
-Lo haré -la miré fijamente-
-¿Que? ¿Porque me miras así? -dijo luego de algunos segundos en que notó mi insistente mirada-
-¿No tenes nada para contarme? -le pregunté curiosa, sabía que tenia algo que contarme-
-Mmm.. que lo recuerde, no -me miró algo nerviosa-
-Dale, no mientas -sonreí- soy tu amiga, podes confiar en mí -le recordé-
-Ufff, esta bien -botó aire y se acomodó en su silla- después de la facu me junte con Nicolás -sonrió ampliamente-
-Lo sabía -aseguré sonriendo-
-¿Como que lo sabías? -me preguntó riendo-
-Mi vida, te recuerdo que Peter el mejor amigo de Nico, es mi novio -dije con un toque de ironía y ambas reímos-
-Boee, disculpame por ser tan boluda y no asociar las cosas che! -reímos-
-Esta bien -dije riendo- ahora contamelo todo!

Y así seguimos charlando hasta que nos dieron las once de la noche, la verdad es que pasar tiempo con Roció era lo mejor que me pudo volver a pasar, era casi mi alma gemela, nos conociamos tan bien y siempre es bueno tener a alguien con quien charlar antes de que te vayas a dormir.

Ya era Viernes, después de la facultad con Peter fuimos a dejar a Tomas al colegio para luego ir a almorzar a algun restaurante.
-¿Donde tenes pensado hacer la practica? -le pregunté mientras comiamos-
-No sé, estoy buscando algún hospital o clinica, dicen que es más cómodo hacerlas ahí -respondió- ¿vos vas bien con la facu?
-Sí, un poco estresada nada más pero ya me voy acostumbrando al ritmo nuevamente -sonreímos- aunque extraño mucho pasarme todo el día con vos -dije tierna-
-Yo lo extraño más -acarició mi mejilla- tengo tiempo libre y pienso en vos -aseguró-
-Awww, sos tan tierno -hice un puchero- me encantaría tener tiempo libre para disfrutarte -me acerqué para abrazarlo un poco-
-Ya lo vas a tener preciosa -acarició mi espalda- mientras que me sigas amando, todo va a estar bien -aseguró riendo-
-Siempre lo voy a hacer! -exclamé-
-Lo tengo claro -besó mi frente- ¿que quiere Tomas para su fiesta de cumpleaños? -preguntó Peter luego de volver a nuestros platos para comer-
-Una fiesta con sus compañeritos, ir al zoológico, al mc y al parque de diversiones -respondí-
-¿Solo eso? -dijo bromiando-
-¿Poquito no? -ironicé y reímos-
-Es un tierno, igual a vos -apretó mis mejillas-
-Auch, auch -me quejé y él rió- ¿me vas a ayudar a complacer a mi hijo? -pestañeé mil veces-
-Obvio que sí lindura -se me acercó y dejo un corto besó en mis labios- todo para hacer feliz al lalito -reímos, siempre lo apodaba así-

Terminamos de comer y nos fuimos hasta mi laburo, lo besé muchisimas veces y al fin me bajé del auto para entrar a la joyería.
-Ultimo día, al fin! -susurró Ricardo, mi compañero de trabajo-
-Ay sí -exclamé feliz- ¿vos también estas estresado? -le pregunté mientras dejaba mis cosas en mi locker-
-Claro que sí, pero tengo que mantener a mi familia así que no me puedo quejar -reímos-
-Y yo a la mía -acoté-
-Tan chiquita y ya con familia.. ¿que pasa con las generaciones de ahora? -bromeó-
-Estas generaciones vienen recargadas de locura -aseguré- asi que preparate para cuando tus hijos crezcan eh! -le advertí-
-Y ya queda poco, Elisa tiene 10 años y ya quiere mini faldas, maquillaje, un novio.. pff.. -reímos-
-Preparese señor! -dije riendo-
Caminamos hasta el mesón y comenzamos a vender, entraba mucha gente, estaba muy cotizado el oro y sobre todo la plata. Hoy fue la tarde en que más vendí de toda mi estadía acá.
Ricardo se ofreció a llevarme hasta mi departamento como algunas otras veces, vivía cerca mió asi que no le costaba nada según él. Era un tipo encantador, agradable y muy sociable, tenía 32 años y estaba casado, su mujer también trabaja ahí pero solo hacía reemplazos, tenian 3 hijos y se amaban por sobre todo. Admiraba muchisimo su relación, eran encantadores y me gustaría llegar algún día a tener una familia como la de ellos.

-¿Que haces acá? -le pregunté muy sorprendida a Pablo al verlo sentado en el living de mi departamento-
-Vine a visitar a Tomas un rato.. -se levantó- disculpame por no avisarte antes pero...
-Esta bien -lo interrumpí- ¿queres algo de tomar o comer? -le ofrecí-
-No no, gracias.. -y volvió a sentarse en el sofá-
Deje mis cosas en la mesa y lo observé, se veía raro, cansado, algo andaba mal en él.
-¿Estas bien? -le pregunté cuando me senté en el sofá de al lado-
-Sí.. -me dijo desgando-
-Pablo -insistí y él me miró, sus ojos estaban muy raros- ¿que te paso? -le pregunté preocupada-
-Nada.. -bajo su vista algo nervioso-
-Podes confiar en mí.. y te conozco, sé que te pasa algo -insistí-
Levantó la vista y me miro triste.
-Mi mamá tiene cáncer -dijo triste- y lo tiene muy avanzado.
-Ohhh...
No dije nada, me levanté y lo abrasé, sabía cuanto importante era su mamá para él, sabía cuanto la amaba y tenía claro que esto le afectaría muchisimo. A pesar de todo lo mal que esa señora me había tratado en su momento, no lo le deseaba el mal a nadie.
Roció entró al living y se quedó tildada mirandonos, me separé de Pablo y la miré. Ella solo se limitó a saludarme y volver a su cuarto.

Continuara...